Miami (enviado especial) - El resultado de las elecciones parlamentarias de hoy se cuenta también en billones de dólares, a la luz de cruciales leyes a votar. Por lo pronto, la decisión más inmediata será si se prorrogan, se profundizan o se restringen los recortes impositivos que estipuló George W. Bush en 2001 y 2003. Ello será decidido seguramente por el Congreso con la composición actual, antes de la asunción de los nuevos legisladores en enero, pero en cualquier caso, el mensaje de las urnas marcará un camino.
En uno de los últimos esfuerzos de campaña, Barack Obama envió ayer un e-mail a sus seguidores en el que aseguró que su proyecto es «mantener bajos los impuestos para la clase media» y denunció el intento de los republicanos de que sean «las corporaciones» las que marquen el camino económico. «Lucharemos contra los intentos de privatizar la seguridad social y frenaremos a quienes quieran poner los ahorros de una generación en Wall Street», abundó el presidente norteamericano en un largo mensaje destinado a contradecir muchas de las acusaciones que le lanza el Tea Party.
El plan de Obama es prorrogar los recortes impositivos para aquellos ciudadanos que ganan menos de u$s 200.000 anuales, o u$s 250.000 en el caso de familias. En cambio, fieles al principio de que la iniciativa privada es más eficiente para activar el mercado, los republicanos proponen continuar con los recortes para todos los segmentos. En ese caso, los costos para las arcas del Estado podrían ascender a u$s 2,7 billones hasta 2020.
Recortes
Un estudio reciente del Tax Policy Center dio cuenta de cuánto significaron los recortes dispuestos por la administración Bush en el período 2004-2010. En el extremo inferior, el 12,5% de los estadounidenses, con ingresos menores a u$s 10.000, ahorró en los 6 años pasados u$s 335. Si los beneficios fueran prorrogados, los más pobres sumarían u$s 5 en 2011.
Superada la mitad de la tabla, cada uno de los estadounidenses que reciben ingresos entre u$s 50.000 y u$s 74.900 (13,1% del total) se ha quedado con u$s 9.839 desde 2004, y podría ahorrar otros u$s 1.180 el próximo año si todo sigue igual.
El 3,4% de los norteamericanos recibe entre u$s 200.000 y u$s 499.000, y el 0,9% supera esa cifra. El 0,3% gana más de u$s 1.000.000, y cada uno de los que componen este sector ahorró u$s 858.000 desde que la administración republicana dispuso la reforma, y sumaría otros u$s 128.832 en 2011. En el extremo superior de la pirámide, el 0,1% reconoce un ingreso promedio per cápita anual de u$s 7,7 millones. En estos casos, han evitado pagar al Estado en concepto de impuestos u$s 2.328.607. El rezo de Obama por correo electrónico continuó con otro de sus frentes de batalla en el plano económico: «Rechazamos volver a los días en que las petroleras y las aseguradoras de salud escribían sus propias reglas y definían sus propias ganancias, mientras vos pagabas en la estación de servicio o quedabas en quiebra mientras se apilaban las cuentas de salud. Tres millones de estadounidenses no estarían trabajando si no fuera por las inversiones que vos y los demócratas en el Congreso ayudaron a poner en marcha».
En uno de los últimos esfuerzos de campaña, Barack Obama envió ayer un e-mail a sus seguidores en el que aseguró que su proyecto es «mantener bajos los impuestos para la clase media» y denunció el intento de los republicanos de que sean «las corporaciones» las que marquen el camino económico. «Lucharemos contra los intentos de privatizar la seguridad social y frenaremos a quienes quieran poner los ahorros de una generación en Wall Street», abundó el presidente norteamericano en un largo mensaje destinado a contradecir muchas de las acusaciones que le lanza el Tea Party.
El plan de Obama es prorrogar los recortes impositivos para aquellos ciudadanos que ganan menos de u$s 200.000 anuales, o u$s 250.000 en el caso de familias. En cambio, fieles al principio de que la iniciativa privada es más eficiente para activar el mercado, los republicanos proponen continuar con los recortes para todos los segmentos. En ese caso, los costos para las arcas del Estado podrían ascender a u$s 2,7 billones hasta 2020.
Recortes
Un estudio reciente del Tax Policy Center dio cuenta de cuánto significaron los recortes dispuestos por la administración Bush en el período 2004-2010. En el extremo inferior, el 12,5% de los estadounidenses, con ingresos menores a u$s 10.000, ahorró en los 6 años pasados u$s 335. Si los beneficios fueran prorrogados, los más pobres sumarían u$s 5 en 2011.
Superada la mitad de la tabla, cada uno de los estadounidenses que reciben ingresos entre u$s 50.000 y u$s 74.900 (13,1% del total) se ha quedado con u$s 9.839 desde 2004, y podría ahorrar otros u$s 1.180 el próximo año si todo sigue igual.
El 3,4% de los norteamericanos recibe entre u$s 200.000 y u$s 499.000, y el 0,9% supera esa cifra. El 0,3% gana más de u$s 1.000.000, y cada uno de los que componen este sector ahorró u$s 858.000 desde que la administración republicana dispuso la reforma, y sumaría otros u$s 128.832 en 2011. En el extremo superior de la pirámide, el 0,1% reconoce un ingreso promedio per cápita anual de u$s 7,7 millones. En estos casos, han evitado pagar al Estado en concepto de impuestos u$s 2.328.607. El rezo de Obama por correo electrónico continuó con otro de sus frentes de batalla en el plano económico: «Rechazamos volver a los días en que las petroleras y las aseguradoras de salud escribían sus propias reglas y definían sus propias ganancias, mientras vos pagabas en la estación de servicio o quedabas en quiebra mientras se apilaban las cuentas de salud. Tres millones de estadounidenses no estarían trabajando si no fuera por las inversiones que vos y los demócratas en el Congreso ayudaron a poner en marcha».
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